Resumen del libro de Isaías
Este resumen del libro de Isaías proporciona información acerca del título, los autores, fecha de escritura, cronología, temas, teología, ideas generales, una breve perspectiva y los capítulos del libro de Isaías.
Posición en la Biblia Hebrea
En la biblia hebrea el libro de Isaías inicia una división llamada los Nuevos Profetas (Para los Antiguos Profetas ver Introducción a Josué: Título y Tema Teológico), incluyendo Jeremías, Ezequiel y los Doce Profetas Menores (llamados así por el tamaño en comparación con los libros de los profetas mayores de Isaías, Jeremías y Ezequiel, no por sugerir que son de menor importancia; ver ensayo; pág. 1341). Por lo tanto, Isaías ocupa un lugar orgulloso entre los Nuevos Profetas. Esto encaja en el por qué a veces se refieren a él como el príncipe de los profetas.
Autor
Isaías hijo de Amoz a menudo se considera uno de los profetas escritores más grande. Su nombre significa “El Señor salva”. Fue contemporáneo con Amós, Oseas y Miqueas, comenzando su ministerio en el año 740 a. C., el año en que el Rey Uzías murió (ver nota en 6:1). De acuerdo a una tradición judía poco sustanciosa (el ascenso de Isaías), él fue aserrado por la mitad durante el reinado de Manasés (Hebreos 11:37). Isaías se casó y tuvo al menos dos hijos, Searjasub (7:3) y Mahersalal-hasbaz (8:3). Él probablemente pasó la mayor parte de su vida en Jerusalén, disfrutando su gran influencia bajo el Rey Ezequías (ver 37:1-2). Isaías también tiene crédito en la escritura de una historia del reino de Uzías (2 Crónicas 26:22).
Muchos estudiosos hoy en día desafían que Isaías haya escrito el libro completo que lleva su nombre. Aun así, es el único nombre adjunto a este (ver 1:1; 2:1; 13:1). El argumento más fuerte para la unidad de Isaías es la expresión “El Santo de Israel” un título dado a Dios que ocurre 12 veces en los cap. 1-39 y 14 veces en los cap. 40-66. Fuera de Isaías, este aparece en el AT solo 6 veces. Hay otros paralelismos verbales entre los cap. 1-39 y los cap. 40-66. Compara los siguientes versos:
Juntos, hay por lo menos 25 palabras o formas hebreas encontradas en Isaías (por ejemplo, en las dos divisiones mayores del libro) que no ocurren en ninguna otra escritura profética.
El uso de Isaías del fuego como una figura de castigo (ver 1:31; 10:17; 26:11; 33:11-14; 34:9-10; 66:24), sus referencias a la “montaña santa” de Jerusalén (ver nota en 2:2-4) y su mención del camino hacia Jerusalén (ver nota en 11:16) son temas recurrentes en el libro.
La estructura de Isaías también discute por su unidad. Los cap. 36-39 constituyen un interludio histórico, el cual concluye con los cap. 1-35 e introduce los cap. 40-66 (ver nota en 36:1).
Varios versos del NT se refieren al profeta Isaías en conexión con varias partes del libro: Mateo 12:17-21 (Isaías 42:1-4); Mateo 3:3 y Lucas 3:4 (Isaías 40:3); Romanos 10:16,20 (Isaías 53:1; 65:1); ver especialmente Jeremías 12:38-41 (Isaías 53:1; 6:10).
Fecha
La mayoría de los eventos mencionados en el cap. 1-39 ocurren durante el ministerio de Isaías (ver 6:1, 14:28,36:1), así que estos capítulos pudieron haber sido completados no más allá de 701 a. C. el año en el que el ejército asirio fue destruido (ver nota en 10:16). El profeta vivió al menos hasta 681 (ver nota en 37:38) y pudieron haber escrito los cap. 40-66 durante sus últimos años. En su mensaje a los exiliados en el sexto siglo a. C., Isaías fue proyectado hacia el futuro, justo como Ezequiel lo hizo en Ezequiel 40-48.
Historia
Isaías escribió durante el periodo tormentoso marcando la expansión del imperio asirio y el declive de Israel. Bajo el Rey Tiglath-Pileser III (745-727 a. C.) los asirios se fueron al lado oeste de Aram (Siria) y Canaán. Alrededor de 733, los reyes de Aram e Israel trataron de presionar a Ahaz, el rey de Judá a unirse en una coalición contra Asiria. Ahaz escogió pedirle ayuda a Tiglath-Pileser, una decisión condenada por Isaías (ver nota en 7:1). Asiria asistió a Judá y conquistó el reino del norte en 722-721. Esto hizo a Judá mucho más vulnerable, y en 701 el rey Senaquerib de Asiria amenazó al mismo Jerusalén (ver 36:1 y su respectiva nota). El rey santo Ezequías oro seriamente, e Isaías predijo que Dios forzaría a los asirios a dejar la ciudad (37:6-7).
Sin embargo, Isaías advirtió a Judá de que su pecado traería cautiverio en las manos de Babilonia. La visita del mensajero del rey babilónico a Ezequías mostró el escenario para esta predicción (ver 39:1,6 y sus respectivas notas). Aunque la caída de Jerusalén no ocurriría hasta 586 a. C., Isaías asume la destrucción de Judá y procede a predecir la restauración del pueblo del cautiverio (ver 40:2-3 y sus respectivas notas). Dios redimiría a su pueblo de Babilonia, así como los rescató de Egipto (ver notas en 35:9; 41:14) Isaías predice el ascenso de Ciro el Persa, quien uniría a los medas y a los persas y conquistaría Babilonia en 539 (ver 41:2 y su nota). El decreto de Ciro permitiría a los judíos regresar a casa en 538-537, una liberación que predijo la salvación mayor del pecado a través de Cristo (ver 52:7 y su respectiva nota).
Temas y Teología
Isaías es un libro que revela las dimensiones completas del juicio y salvación de Dios. Dios es el “Único Santo de Israel” (ver 1:4; 6:1 y sus notas) quién debe castigar a su pueblo rebelde (1:2) pero los redimirá al final (41:14,16). Israel es una nación ciega y sorda (6:9-10; 42:7), un viñedo que será pisoteado (5:1-7), un pueblo devoto de la justicia y rectitud (5:7, 10:1-2). El juicio doloroso que será liberado sobre Israel y todas las naciones que desafíen a Dios es llamado “el día del Señor”. Aunque Israel tiene un abrebocas de ese día (5:30; 42:25), las naciones soportan todo su poder (ver 2:11,17,20 y su respectiva nota). Es un día asociado en el Nuevo Testamento con la segunda venida de Cristo junto al juicio (ver 24:1,21; 34:1-2 y sus notas). A través del libro, se refieren al juicio de Dios como “fuego” (ver 1:31; 30:33 y sus notas). Él es el “Señor Soberano” (ver nota en 25:8), sobre todas las naciones y gobiernos (40:15-24).
Aun así, Dios tendrá compasión por su gente (14:1-2) y los rescatará de la opresión política y espiritual. Su restauración es como un nuevo éxodo (43:2,16-19; 52:10-12) mientras Dios los redime (ver 35:9; 41.14 y sus notas) y los salva (ver 43:3; 49:8 y sus notas). El Creador poderoso de Israel (40:21-22; 48:13) hará torrentes en el desierto (32:2) mientras los guía a casa con gracia. El tema de un camino de retorno para los exiliados es prominente (ver 11:16; 40:3 y sus notas) en ambas partes mayores del libro. El Señor levanta una bandera para llamar a todas las naciones a traer a Israel a casa (ver 5:26 y su nota).
La paz y la seguridad marcan esta nueva era mesiánica (11:6-9). Un rey descendiente de David reinará en rectitud (9:7; 32:1), y todas las naciones fluirán hacia la montaña santa de Jerusalén (ver 2:2-4 y su nota). El pueblo de Dios no será oprimido por gobernantes malvados (11:14; 45:14), y Jerusalén será verdaderamente la “Ciudad del Señor” (60:14).
El Señor llama al Rey Mesiánico “mi siervo” en cap. 42-53, un término aplicado también a Israel como nación (ver 41:8-9, 42:1 y sus notas). Es a través del sufrimiento del siervo que la salvación será lograda por completo. Ciro fue el instrumento de Dios para liberar a Israel de Babilonia (41:2), pero Cristo liberó a la humanidad de la prisión del pecado (52:13 – 53:12). Él se convirtió en una “luz para los gentiles” (42:6), para que esas naciones que enfrenten juicio (cap. 13-23) puedan encontrar salvación (55:4-5). Estos gentiles también se convirtieron en “siervos del Señor”.
El reino del Señor en la tierra con su gobernante y sujetos justos, es la meta a la cual se inclina el libro de Isaías. La tierra restaurada y el pueblo restaurado conformarán el ideal divino, y todo resultará en la oración y gloria del Único Santo de Israel por lo que ha logrado.
Características Literarias
Isaías contiene ambos prosa y poesía; la belleza de su poesía es insuperable en el Antiguo Testamento. El material principal de prosa es encontrado en los cap. 36-39, en el interludio histórico que une las dos partes del libro (ver Autor). El material poético incluye una serie de oráculos en los cap. 13-23. Una canción provocadora contra el rey de Babilonia se encuentra en 14:4-23. Los cap. 24-27 comprenden una sección apocalíptica que hace énfasis en los últimos días (ver nota en 24:1 – 27:3). Un poema de sabiduría se encuentra en 28:23-29 (también 32:5-8) La canción del viñedo (5:1-7) comienza como una canción de amor con la que Isaías describe la relación de Dios con Israel. Himnos de alabanza se dan en 12:1-6 y 38:10-20, y un lamento nacional ocurre en 63:7 – 64:12. La poesía es rica y variada como el vocabulario del profeta (él usa un vocabulario más amplio de palabras hebreas de lo que lo hace cualquier otro escritor del Antiguo Testamento).
Una de las técnicas favoritas de Isaías es la personificación. El sol y la luna están avergonzados (24:23), mientras que se alegran el desierto y la soledad (ver 35:1 y su respectiva nota) y las montañas y los bosques entran en alabanza (44:23). Los árboles “aplauden” (55:12). Una figura favorita es el viñedo, el cual representa a Israel (5:7). Pisar la prensa de vino es una imagen de juicio (ver 63:3 y su respectiva nota), y beber la “copa de ira” de Dios es tambalearse bajo su castigo (ver 51:17 y su respectiva nota). Isaías usa el nombre “Roca” para describir a Dios (17:10), y a los animales como el Leviatán y Rahab para representar a las naciones.
El poder de las metáforas de Isaías es vista en 30:27-33, y él hace uso completo del sarcasmo en su denuncia de los ídolos en 44:9-20. Un fuerte ejemplo del juego de palabras aparece en 5:7 (ver nota allí), y uno encuentra una inversión en 6:10 (ver nota allí, también ver nota en 16:7) y la aliteración y asonancia en 24:16-17 (ver nota allí). El “látigo abrumador” de 28:15,18 es una ilustración de una metáfora combinada.
Isaías a menudo alude a los eventos tempranos en la historia de Israel, especialmente en el éxodo de Egipto. El cruce del Mar Rojo forma la historia para 11:15 y 43:2,16-17, y otras alusiones ocurren en 4:5-6; 31:5; 37:36 (ver notas en estos versos). La destrucción de Sodoma y Gomorra se menciona en 1:9, y la victoria de Gideon y Madián se menciona en 9:4; 10:26 (ver también 28:21). Isaías se basa varias veces en la canción de Moisés en Deuteronomio 32 (compara 1:2 con Deuteronomio 32:1; 30:17 con Deuteronomio 32:30; y 43:11,13 con Deuteronomio 32:39). Isaías, como Moisés, llamó a la nación a arrepentirse y a tener fe en un Dios santo y todopoderoso.
El refrán en 48:22 y 57:21 divide los últimos 27 capítulos en tres secciones de nueve capítulos cada uno (40-48; 49-57; 58-66; ver Esquema).
Esquema
Parte 1: El Libro del Juicio (cap. 1 - 39)
Parte 2: El Libro del Consuelo (cap. 40-66)