La Biblia de las Américas (Español) BLA
2 Samuel 14:11
Y ella dijo: Te ruego, oh rey, que te acuerdes del SEÑOR tu Dios, para que el vengador de sangre no aumente el daño, no sea que destruya a mi hijo. Y él dijo: Vive el SEÑOR, ni un pelo de tu hijo caerá a tierra.
English Standard Version ESV
11
Then she said, "Please let the king invoke the LORD your God, that the avenger of blood kill no more, and my son be not destroyed." He said, "As the LORD lives, not one hair of your son shall fall to the ground."
La Biblia del Jubileo 2000 JBS
11
Dijo ella entonces: Te ruego, oh rey, que te acuerdes del SEÑOR tu Dios, que no dejes a los vengadores {Heb. redentores} de la sangre aumentar el daño con destruir a mi hijo. Y él respondió: Vive el SEÑOR, que no caerá ni un cabello de la cabeza de tu hijo en tierra
New King James Version NKJV
11
Then she said, "Please let the king remember the Lord your God, and do not permit the avenger of blood to destroy anymore, lest they destroy my son." And he said, "As the Lord lives, not one hair of your son shall fall to the ground."
Nueva Traducción Viviente NTV
2 Samuel 14:11
Luego ella dijo:
—Por favor, júreme por el Señor
su Dios que no dejará que nadie tome venganza contra mi hijo. No quiero más derramamiento de sangre.
—Tan cierto como que el Señor
vive —le respondió—, ¡no se tocará ni un solo cabello de la cabeza de tu hijo!
Nueva Versión Internacional NVI
11
Entonces ella le suplicó:—¡Ruego a Su Majestad invocar al SEÑOR su Dios, para que quien deba vengar la muerte de mi hijo no aumente mi desgracia matando a mi otro hijo!—¡Tan cierto como que el SEÑOR vive —respondió el rey—, juro que tu hijo no perderá ni un solo cabello!
La Biblia Reina-Valera (Español) RVR
11
Dijo ella entonces: Ruégote, oh rey, que te acuerdes de Jehová tu Dios, que no dejes á los cercanos de la sangre aumentar el daño con destruir á mi hijo. Y él respondió: Vive Jehová, que no caerá ni un cabello de la cabeza de tu hijo en tierra.
Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV
11
Dijo ella entonces : Te ruego, oh rey, que te acuerdes del SEÑOR tu Dios, que no dejes a los vengadores de la sangre aumentar el daño con destruir a mi hijo. Y él respondió: Vive el SEÑOR, que no caerá ni un cabello de la cabeza de tu hijo en tierra.