5
Mas él, sacudiendo la bestia en el fuego, ningún mal padeció
6
Pero ellos estaban esperando cuándo se había de hinchar, o caer muerto de repente; mas habiendo esperado mucho, y viendo que ningún mal le venía, mudados, decían que era un dios
7
En aquellos lugares había heredades de un principal de la isla, llamado Publio, el cual nos recibió y hospedó tres días humanamente
8
Y aconteció que el padre de Publio estaba en cama, enfermo de fiebres y de disentería; al cual Pablo entró, y después de haber orado, le puso las manos encima, y le sanó
9
y esto hecho, también otros que en la isla tenían enfermedades, llegaban, y eran sanados
10
los cuales también nos honraron con muchos obsequios; y cuando partimos, nos cargaron de las cosas necesarias
11
Así que, pasados tres meses, navegamos en una nave alejandrina que había invernado en la isla, la cual tenía por enseña a Cástor y Pólux
12
Y llegados a Siracusa, estuvimos allí tres días
13
De allí, costeando alrededor, vinimos a Regio; y otro día después, soplando el austro, vinimos al segundo día a Puteoli
14
donde habiendo hallado los hermanos, nos rogaron que nos quedáramos con ellos siete días; y luego vinimos a Roma
15
de donde, oyendo de nosotros los hermanos, nos salieron a recibir hasta la plaza de Apio, y Las Tres Tabernas, a los cuales como Pablo vio, dio gracias a Dios, y tomó aliento
16
Cuando llegamos a Roma, el centurión entregó los presos al prefecto de los ejércitos, mas a Pablo fue permitido estar por sí, con un soldado que le guardara
17
Y aconteció que tres días después, Pablo convocó a los principales de los judíos; a los cuales, luego que estuvieron juntos, les dijo: Yo, varones hermanos, no habiendo hecho nada contra el pueblo, ni contra los ritos de la patria, he sido entregado preso desde Jerusalén en manos de los romanos
18
los cuales, habiéndome examinado, me querían soltar; por no haber en mí ninguna causa de muerte
19
Mas contradiciendo los judíos, fui forzado a apelar a César; no que tenga de qué acusar a mi nación
20
Así que, por esta causa, os he llamado para veros y hablaros; porque por la esperanza de Israel estoy rodeado de esta cadena
21
Entonces ellos le dijeron: Nosotros ni hemos recibido cartas tocante a ti de Judea, ni viniendo alguno de los hermanos nos haya denunciado o hablado algún mal de ti
22
Mas querríamos oír de ti lo que sientes; porque de esta secta notorio nos es que en todos lugares es contradicha
23
Y habiéndoles señalado un día, vinieron a él muchos a la posada, a los cuales declaraba y testificaba el Reino de Dios, procurando persuadirles lo que es de Jesús, el Cristo, por la ley de Moisés y por los profetas, desde la mañana hasta la tarde
24
Y algunos asentían a lo que se decía, mas algunos no creían
25
Y como fueron entre sí discordes, se fueron, diciendo Pablo esta palabra: Bien ha hablado el Espíritu Santo por el profeta Isaías a nuestros padres
Otras traducciones de Hechos 28:5
La Biblia de las Américas (Español) BLA
Hechos 28:5
Pablo, sin embargo, sacudiendo la mano, arrojó el animal al fuego y no sufrió ningún daño.
English Standard Version ESV
5
He, however, shook off the creature into the fire and suffered no harm.
King James Version KJV
5
And he shook off the beast into the fire, and felt no harm.
New King James Version NKJV
5
But he shook off the creature into the fire and suffered no harm.
Nueva Traducción Viviente NTV
Hechos 28:5
pero Pablo se sacudió la serpiente en el fuego y no sufrió ningún daño.
Nueva Versión Internacional NVI
5
Pero Pablo sacudió la mano y la serpiente cayó en el fuego, y él no sufrió ningún daño.
La Biblia Reina-Valera (Español) RVR
5
Mas él, sacudiendo la víbora en el fuego, ningún mal padeció.
Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV
5
Mas él, sacudiendo la bestia en el fuego, ningún mal padeció.