12 Pues al derramar ella este perfume sobre mi cuerpo, lo ha hecho a fin de prepararme para la sepultura.
13 En verdad os digo: Dondequiera que este evangelio se predique, en el mundo entero, se hablará también de lo que ésta ha hecho, en memoria suya.
14 Entonces uno de los doce, llamado Judas Iscariote, fue a los principales sacerdotes,
15 y dijo: ¿Qué estáis dispuestos a darme para que yo os lo entregue? Y ellos le pesaron treinta piezas de plata.
16 Y desde entonces buscaba una oportunidad para entregarle.
17 El primer día de la fiesta de los panes sin levadura, se acercaron los discípulos a Jesús, diciendo: ¿Dónde quieres que te hagamos los preparativos para comer la Pascua?
18 Y El respondió: Id a la ciudad, a cierto hombre, y decidle: "El Maestro dice: 'Mi tiempo está cerca; quiero celebrar la Pascua en tu casa con mis discípulos.'"
19 Entonces los discípulos hicieron como Jesús les había mandado, y prepararon la Pascua.
20 Al atardecer, estaba El sentado a la mesa con los doce discípulos.
21 Y mientras comían, dijo: En verdad os digo que uno de vosotros me entregará.
22 Y ellos, profundamente entristecidos, comenzaron a decirle uno por uno: ¿Acaso soy yo, Señor?
23 Respondiendo El, dijo: El que metió la mano conmigo en el plato, ése me entregará.
24 El Hijo del Hombre se va, según está escrito de El; pero ¡ay de aquel hombre por quien el Hijo del Hombre es entregado! Mejor le fuera a ese hombre no haber nacido.
25 Y respondiendo Judas, el que le iba a entregar, dijo: ¿Acaso soy yo, Rabí? Y El le dijo: Tú lo has dicho.
26 Mientras comían, Jesús tomó pan, y habiéndolo bendecido, lo partió, y dándoselo a los discípulos, dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo.
27 Y tomando una copa, y habiendo dado gracias, se la dio, diciendo: Bebed todos de ella;
28 porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que es derramada por muchos para el perdón de los pecados.
29 Y os digo que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día cuando lo beba nuevo con vosotros en el reino de mi Padre.
30 Y después de cantar un himno, salieron hacia el monte de los Olivos.
31 Entonces Jesús les dijo<***>: Esta noche todos vosotros os apartaréis por causa de mí, pues escrito está: "HERIRE AL PASTOR, Y LAS OVEJAS DEL REBAÑO SE DISPERSARAN."
32 Pero después de que yo haya resucitado, iré delante de vosotros a Galilea.
33 Entonces Pedro, respondiendo, le dijo: Aunque todos se aparten por causa de ti, yo nunca me apartaré.
34 Jesús le dijo: En verdad te digo que esta misma noche, antes que el gallo cante, me negarás tres veces.
35 Pedro le dijo<***>: Aunque tenga que morir contigo, jamás te negaré. Todos los discípulos dijeron también lo mismo.
36 Entonces Jesús llegó<***> con ellos a un lugar que se llama Getsemaní, y dijo<***> a sus discípulos: Sentaos aquí mientras yo voy allá y oro.
37 Y tomando consigo a Pedro y a los dos hijos de Zebedeo, comenzó a entristecerse y a angustiarse.
38 Entonces les dijo<***>: Mi alma está muy afligida, hasta el punto de la muerte; quedaos aquí y velad conmigo.
39 Y adelantándose un poco, cayó sobre su rostro, orando y diciendo: Padre mío, si es posible, que pase de mí esta copa; pero no sea como yo quiero, sino como tú quieras.
40 Vino<***> entonces a los discípulos y los halló<***> durmiendo, y dijo<***> a Pedro: ¿Conque no pudisteis velar una hora conmigo?
41 Velad y orad para que no entréis en tentación; el espíritu está dispuesto, pero la carne es débil.
42 Apartándose de nuevo, oró por segunda vez, diciendo: Padre mío, si ésta no puede pasar sin que yo la beba, hágase tu voluntad.
43 Y vino otra vez y los halló durmiendo, porque sus ojos estaban cargados de sueño.
44 Dejándolos de nuevo, se fue y oró por tercera vez, diciendo otra vez las mismas palabras.
45 Entonces vino<***> a los discípulos y les dijo<***>: ¿Todavía estáis durmiendo y descansando? He aquí, ha llegado la hora, y el Hijo del Hombre es entregado en manos de pecadores.
46 ¡Levantaos! ¡Vamos! Mirad, está cerca el que me entrega.
47 Mientras todavía estaba El hablando, he aquí, Judas, uno de los doce, llegó acompañado de una gran multitud con espadas y garrotes, de parte de los principales sacerdotes y de los ancianos del pueblo.
48 Y el que le entregaba les había dado una señal, diciendo: Al que yo bese, ése es; prendedle.
49 Y enseguida se acercó a Jesús y dijo: ¡Salve, Rabí! Y le besó.
50 Y Jesús le dijo: Amigo, haz lo que viniste a hacer. Entonces ellos se acercaron, echaron mano a Jesús y le prendieron.
51 Y sucedió que uno de los que estaban con Jesús, extendiendo la mano, sacó su espada, e hiriendo al siervo del sumo sacerdote, le cortó la oreja.
52 Entonces Jesús le dijo<***>: Vuelve tu espada a su sitio, porque todos los que tomen la espada, a espada perecerán.

Otras traducciones de Mateo 26:12

English Standard Version ESV

Matthew 26:12 In pouring this ointment on my body, she has done it to prepare me for burial.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

12 Porque echando este ungüento sobre mi cuerpo, para sepultarme lo ha hecho

King James Version KJV

12 For in that she hath poured this ointment on my body, she did it for my burial.

New King James Version NKJV

12 For in pouring this fragrant oil on My body, she did it for My burial.

Nueva Traducción Viviente NTV

Mateo 26:12 Ella ha derramado este perfume sobre mí a fin de preparar mi cuerpo para el entierro.

Nueva Versión Internacional NVI

12 Al derramar ella este perfume sobre mi cuerpo, lo hizo a fin de prepararme para la sepultura.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

12 Porque echando este unguento sobre mi cuerpo, para sepultarme lo ha hecho.

Sagradas Escrituras (1569) (Español) SEV

12 Porque echando este ungüento sobre mi cuerpo, para sepultarme lo ha hecho.
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