Resumen de Ezequiel 3: "Otra vez me dijo: «Hijo de hombre, ve a la nación de Israel y proclámale mis palabras". "Pero el pueblo de Israel no va a escucharte porque no quiere obedecerme. Todo el pueblo de Israel es terco y obstinado". "¡Te haré inquebrantable como el diamante, inconmovible como la roca! No les tengas miedo ni te asustes, por más que sean un pueblo rebelde".