Resumen de Hageo 2: “¿Queda alguien entre ustedes que haya visto esta casa en su antiguo esplendor?". "Pues ahora, ¡ánimo, Zorobabel! —afirma el SEÑOR—. ¡Ánimo, Josué hijo de Josadac! ¡Tú eres el sumo sacerdote! ¡Ánimo, pueblo de esta tierra! —afirma el SEÑOR—. ¡Manos a la obra, que yo estoy con ustedes! —afirma el SEÑORTodopoderoso—". "«Así dice el SEÑOR Todopoderoso: “Consulta a los sacerdotes sobre las cosas sagradas”»."