3 Y todos los príncipes de las provincias, y los virreyes, y capitanes, y oficiales del rey, ensalzaban a los judíos; porque el temor de Mardoqueo había caído sobre ellos.
4 Porque Mardoqueo era grande en la casa del rey, y su fama iba por todas las provincias; pues el varón Mardoqueo iba engrandeciéndose.
5 E hirieron los judíos a todos sus enemigos con plaga de espada, y de mortandad, y de perdición; e hicieron en sus enemigos a su voluntad.
6 Y en Susa capital del reino, mataron y destruyeron los judíos a quinientos hombres.
7 Mataron entonces a Parsandata, y a Dalfón, y a Aspata,
8 y a Porata y a Adalía, y a Aridata,
9 y a Parmasta, y a Arisai, y a Aridai, y a Vaizata,
10 diez hijos de Amán hijo de Hamedata, enemigo de los judíos; mas en el despojo no metieron su mano.
11 El mismo día vino la cuenta de los muertos en Susa capital del reino, delante del rey.
12 Y dijo el rey a la reina Ester: En Susa, capital del reino, los judíos han matado y destruido a quinientos hombres, y a diez hijos de Amán; ¿qué habrán hecho en las otras provincias del rey? ¿Cuál pues es tu petición, y te será concedida? ¿Y qué más es tu demanda, y será hecho?
13 Y respondió Ester: Si place al rey, concédase también mañana a los judíos en Susa, que hagan conforme a la ley de hoy; y que cuelguen en la horca a los diez hijos de Amán.
14 Y mandó el rey que se hiciese así; y fue dada por ley en Susa, y colgaron a los diez hijos de Amán.
15 Y los judíos que estaban en Susa, se juntaron también el catorce del mes de Adar, y mataron en Susa trescientos hombres; mas en el despojo no metieron su mano.
16 Y los otros judíos que estaban en las provincias del rey, también se juntaron y se pusieron en defensa de su vida, y tuvieron reposo de sus enemigos, y mataron de sus enemigos setenta y cinco mil; mas en el despojo no metieron su mano.
17 En el día trece del mes de Adar fue esto; y reposaron en el día catorce del mismo, y lo hicieron día de banquete y de alegría.
18 Mas los judíos que estaban en Susa se juntaron en el trece y en el catorce del mismo mes ; y al quince del mismo reposaron, y lo hicieron día de banquete y de alegría.
19 Por tanto los judíos aldeanos que habitan en las villas sin muro, hacen a los catorce del mes de Adar el día de alegría y de banquete, y buen día, y de enviar porciones cada uno a su vecino.
20 Y escribió Mardoqueo estas cosas, y envió cartas a todos los judíos que estaban en todas las provincias del rey Asuero, cercanos y distantes,
21 Constituyéndoles que celebrasen el día décimocuarto del mes de Adar, y el decimoquinto del mismo, cada año,
22 por aquellos días en que los judíos tuvieron reposo de sus enemigos, y el mes que se les fue tornado de tristeza en alegría, y de luto en día bueno; que los hiciesen días de banquete y de gozo, y de enviar porciones cada uno a su vecino, y dádivas a los pobres.
23 Y los judíos aceptaron y comenzaron a hacer, lo que les escribió Mardoqueo.
24 Porque Amán hijo de Hamedata, agageo, enemigo de los judíos, había ideado contra los judíos para destruirlos, y echó Pur, que quiere decir suerte, para consumirlos y echarlos a perder.
25 Mas cuando ella vino a la presencia del rey, él ordenó por escrito: El perverso designio que aquél trazó contra los judíos, recaiga sobre su cabeza; y cuélguenlo a él y a sus hijos en la horca.
26 Por esto llamaron a estos días Purim, del nombre Pur. Por todas las palabras pues de esta carta, y por lo que ellos vieron sobre esto, y lo que llegó a su noticia,
27 establecieron y tomaron los judíos sobre sí, y sobre su simiente, y sobre todos los allegados a ellos, y no será traspasado, el celebrar estos dos días según está escrito en orden a ellos, y conforme a su tiempo cada año;
28 y que estos dos días serían en memoria, y celebrados en todas las naciones, y familias, y provincias, y ciudades. Estos días de Purim no pasarán de entre los judíos, y la memoria de ellos no cesará de su simiente.
29 Y la reina Ester hija de Abihail, y Mardoqueo judío, escribieron con toda autoridad, para confirmar esta segunda carta de Purim.
30 Y envió Mardoqueo cartas a todos los judíos, a las ciento veintisiete provincias del rey Asuero, con palabras de paz y de verdad,
31 para confirmar estos días del Purim en sus tiempos señalados , según les había constituído Mardoqueo judío y la reina Ester, y como habían ellos tomado sobre sí y sobre su simiente las palabras de los ayunos y de su clamor.
32 Y el mandamiento de Ester confirmó estas palabras del Purim, y fue escrito en el libro.

Otras traducciones de Ester 9:3

La Biblia de las Américas (Español) BLA

Ester 9:3 Y todos los príncipes de las provincias, los sátrapas, los gobernadores y los que manejaban los negocios del rey ayudaron a los judíos, porque el temor a Mardoqueo había caído sobre ellos,

English Standard Version ESV

3 All the officials of the provinces and the satraps and the governors and the royal agents also helped the Jews, for the fear of Mordecai had fallen on them.

La Biblia del Jubileo 2000 JBS

3 Y todos los príncipes de las provincias, los virreyes, capitanes, y oficiales del rey, ensalzaban a los judíos; porque el temor de Mardoqueo había caído sobre ellos

King James Version KJV

3 And all the rulers of the provinces, and the lieutenants, and the deputies, and officers of the king, helped the Jews; because the fear of Mordecai fell upon them.

New King James Version NKJV

Esther 9:3 And all the officials of the provinces, the satraps, the governors, and all those doing the king's work, helped the Jews, because the fear of Mordecai fell upon them.

Nueva Traducción Viviente NTV

3 Además, todos los nobles de las provincias, los funcionarios de más alta posición, los gobernadores y los funcionarios reales ayudaron a los judíos por temor a Mardoqueo.

Nueva Versión Internacional NVI

3 Los funcionarios de las provincias, los sátrapas, los intendentes y los administradores del rey apoyaban a los judíos, porque el miedo a Mardoqueo se había apoderado de todos ellos.

La Biblia Reina-Valera (Español) RVR

3 Y todos los príncipes de las provincias, y los virreyes, y capitanes, y oficiales del rey, ensalzaban á los Judíos; porque el temor de Mardochêo había caído sobre ellos.
No Venda Mi Información Personal (CA Solamente)   California - Aviso de la CCPA