Tres amigos de la universidad y yo nos sentamos en un salón de un hotel, hablando acerca de los días de nuestra juventud. “¿Qué estaba pensando? Todas las señales estaban allí, diciéndome que él era el chico equivocado” dijo una de ellas mientras sorbía su latte. “No vi las señales porque estaba muy ocupada estando enamorada de la idea de ser amada”

“Yo también”, dijo mi otra amiga. “¿Por qué alguien no escribió el libro acerca de cómo encontrar el hombre de tus sueños?”

LAS CUATRO SONREÍMOS. Nos graduamos en la misma universidad, vivimos en el mismo dormitorio. Y, aunque ninguna de nosotras lo admitiría, compartimos una inquietud similar acerca de encontrar el hombre apropiado. Asistimos a clases, pero en el campus de esa universidad, lo que secretamente estudiábamos era la población masculina, esperando que uno de ellos tuviera madera de esposo.

En general, la búsqueda era divertida. Pero a veces, las altas expectativas finalizaban en una profunda decepción. Y otras veces, el “amor” que perseguíamos terminaba con el dolor persiguiéndonos.

Pero incluso con algunas cicatrices, lo superamos. Y ahora, a pesar de que tres de ellas están divorciadas, dejándome como la única que aún está casada con su novio de la universidad, poseemos una perspectiva rica sobre el tema. La mayoría ganada de experiencias vividas, episodios que fortalecen y lecciones aprendidas en el salón de clases del dolor.

Cuán diferentes habrían sido nuestras vidas si hubiéramos tenido la sabiduría para diferenciar estas señales.  

Señal 1: Él permite que su romance se convierta en un recorrido físico.

Y con palabras suaves, él intenta invadir las barreras que claramente estableciste más de una vez. Una y otra vez insiste, susurrando que te amará por siempre esperando que cedas. Cuidado: Esa es su testosterona hablando, no un hombre de integridad que te valora y respeta. Ahí es cuando Satanás entra en acción repitiendo, “Lo perderás si no cedes” Falso. Solo perderás tu propia integridad y ganaras el dolor que trae la desobediencia.

Momento de evaluar: Si fallas en esta parte, Dios te perdonará cuando lo pidas. Te otorgará una claridad y paz renovadas. Y con confianza puedes declarar: “Con mi boca clamé a Él, y ensalzado fue con mi lengua. Si observo iniquidad en mi corazón, el Señor no me escuchará” (Salmos 66:17-18)

Señal 2: Su sinceridad es cuestionable.

Cuando hablar de tus convicciones cristianas, él está de acuerdo contigo. Cuando lo invitas a visitar tu iglesia, él va. Pero cuando le pides que ore contigo, él retrocede. O cuando discuten problemas profundos acerca de la espiritualidad, él es ambiguo y distante. Advertencia: podría estar pasando por los ademanes de ganarte. Esta señal necesita resplandecer recordándote que no es un líder espiritual, el tipo que necesitas para que los planes de matrimonio aparezcan en el horizonte.

Momento de evaluar: Sé honesta a Dios primero y sé sincera en tu petición por Su orientación para identificar el líder espiritual fuerte con convicciones seguras y un buen carácter para que sea tu futuro esposo. Luego repite con confianza, “Por la mañana hazme oír tu misericordia, porque en ti confío; enséñame el camino por el que debo andar, pues a ti elevo mi alma. Líbrame de mis enemigos, oh SEÑOR; en ti me refugio. Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios; tu buen Espíritu me guíe a tierra firme.” (Salmos 143:8-10)

Señal 3: Otros te advierten.

Piensas que él es el único porque te “hace sentir tan bien”. Pero aquellos a tu alrededor quienes te conocen bien y a quienes respetas te dan sus advertencias. Ellos apuntan fallas que dejas pasar porque estás muy “enamorada” que te has vuelto sorda a su sabiduría. Pero a menudo los sentimientos pueden estar errados. Y las emociones pueden cegar a uno de ver trampas potenciales.

Momento de evaluar: Tu propio camino a la felicidad podría no ser la forma en la que Dios te traerá alegría duradera. Reflejado en el consejo dado, y sin importar cuán definidos sean tus planes, dale la bienvenida al consejo sabio de aquellos que te aman porque “Sin consulta, los planes se frustran, pero con muchos consejeros, triunfan.” (Proverbios 15:22)

Señal 4: Las críticas se convierten en un patrón

A menudo podrías confundir la humildad y la paciencia cuando esté libre con críticas duras a través de otros y de ti. Pero cuando experimentas esta dura prueba, podría ser una señal de potencial abuso emocional que solo aumente luego del día de la boda.

Momento de evaluar: Por el hecho de que tú eres la hija del Rey, no debes soportar palabras dolorosas, tratos insensibles o incluso rudeza. Espera ser tratada con respeto porque sabes quién eres – la pieza maestra en las manos de Dios mientras declaras: “Te alabaré, porque asombrosa y maravillosamente he sido hecho; maravillosas son tus obras, y mi alma lo sabe muy bien.” (Salmos 139:14)

Señal 5: Él se encuentra en una mala situación

Aunque el dinero no es el aspecto más importante de una relación es la razón número uno para un divorcio. Y si el matrimonio es una posibilidad con el hombre que estás saliendo, observa su actitud hacia el dinero, sus hábitos de gastos y su compromiso con el diezmo. Cada uno de estos te dará pistas acerca de qué esperar si te convirtieras en su esposa. Si es una criatura que vuela a las tarjetas de crédito en casa pasada, ya eso es una pista para indagar un poco más. De otra manera, entrar en un matrimonio con deudas, problemas de dinero y problemas financieros seguramente estarás caminando al altar del desastre.

Momento de evaluar: ¿Qué atesora? ¿Qué guarda en su corazón? Este es el estándar con el que debes medirlo: “Almacena tus tesoros en el cielo, donde las polillas y el óxido no pueden destruir, y los ladrones no entran a robar.” (Mateo 6:20)

Bien sea que tengas 20 o 60 años de edad, o bien sea que esta sea tu primera cita o ya estés por enviar las invitaciones de la boda, trae a tu amiga contigo. Su nombre es “sabiduría”. La sabiduría de Dios te ayudará a responder esas dos preguntas vitales: ¿Ama este hombre más a Dios que a mí?, Y ¿sus palabras, acciones, actitudes, comportamiento, sueños y carácter reflejan su convicción?

Las respuestas a esas preguntas determinarán si décadas luego estarás tomando el latte del remordimiento o sorbiendo el agua fresca de la verdadera felicidad en el matrimonio.

Janet Perez Eckles es una vocera internacional ante audiencias de habla inglesa e hispana. Ella es una conductora de radio y la autora de cuatro libros, incluyendo Simplemente Salsa: Bailando Sin Miedo en la Fiesta de Dios¸ donde ayuda a miles a aprender a celebrar la vida y a encontrar la alegría conquistando el miedo. www.janetperezeckles.com