Nuestro Prójimo Nos Necesita
No seas vengativo con tu prójimo, ni le guardes rencor. Ama a tu prójimo como a ti mismo. Levítico 19:18
Durante la revolución estadounidense un hombre llamado Michael Wittman fue sentenciado a morir por traidor. Un pastor que había sido objeto del odio de Wittman caminó más de cien kilómetros para rogarle al general George Washington por la vida de Wittman.Washington se negó, pero cuando descubrió que Wittman no era amigo sino enemigo del pastor, en honor a la demostración de amor de su enemigo, le perdonó la vida y le dio la libertad. Luego Wittman se convirtió en un buen amigo del pastor.
Una de las parábolas más conocidas entre las que contó Jesús trata de dos religiosos, un sacerdote y un levita, que no mostraron amor por un moribundo. Fue un enemigo de este hombre, un samaritano, el que al pasar junto a él lo ayudó y salvó su vida (Lucas 10:30-37). Jesús contó esta historia para ilustrar el verdadero significado de su mandamiento: «Ama a tu prójimo».
La disposición a amar al prójimo nos la enseñó Dios al enviar a Jesús para que muriera por nosotros, sus enemigos (Romanos 5:8,10). Hemos de amar a los demás así como Cristo nos amó (1 Juan 4:11). El buen samaritano cambió su mundo con el amor. ¿Hay algún prójimo en su mundo cuya vida podría cambiar con el amor que usted le brinde?
¿Quién es su prójimo? Su prójimo es cualquier persona que tenga una necesidad que usted pueda satisfacer.
©2007 Editorial Vida (Dr. David Jeremiah)
P. O. Box 3804
San Diego, CA 92163-1804
Email: [email protected]