Una oración para cuando te sientas agobiado
Escrito por Glynnis Whitwer
“Lanzad vuestros cuidados a Jehová y él os sostendrá; nunca dejará que el justo sea sacudido”. - Salmos 55:22
Cuando adoptamos a nuestras dos hijas de África, no esperábamos que fuera fácil. Pero no podíamos haber imaginado lo difícil que sería.
Nuestra familia de cinco (mi esposo, nuestros tres hijos y yo) escuchó claramente el llamado de Dios. Sabíamos que nuestra familia debía crecer a siete. Y mientras miramos la foto de dos hermanas pequeñas de pie en un lote de tierra llena de basura, nuestros corazones confirmaron que estos eran nuestros hijos.
La alegría de llevar a estas preciosas chicas a su hogar para siempre fue desbordante... durante aproximadamente una semana.
Entonces la realidad se puso en juego.
Lo que no podíamos ver en la imagen inicial, y lo que el orfanato no podía decirnos, era la herida que había sucedido en uno de sus corazones durante sus primeros años. El abandono y el abuso causaron profundas grietas en su corazón que no se curarían fácilmente.
Nuestros días estaban llenos de desafíos que afectaron a todos. Los días se convirtieron en años, y los problemas que esperábamos que recibieran curación sólo empeorarían. Nuestra casa era como una caja de yesca, lista para explotar en cualquier momento. Y lo hizo. frecuentemente.
Múltiples consejeros y centros de tratamiento no parecían tocar los problemas subyacentes, y comencé a sentirme desesperada. No pude ayudar a mi hija, y no podía proteger a mi familia. La culpa nos abrumó a mí y a mi marido. Hemos detectado un problema desconocido. ¿Y cómo podríamos manejar las emociones intensas?
Realmente parecía demasiado para soportar.
Antes de eso, nunca había entendido lo que significaba llegar al final de ti mismo. La vida había sido relativamente fácil, y los problemas parecían reparables. Pero en ese momento, me enfrenté a una situación más allá de mis habilidades. Necesitaba al Señor como nunca lo había necesitado antes.
Fue entonces cuando las Escrituras como Salmos 55:22 tomaron un nuevo significado: "Echad vuestras preocupaciones a Jehová y él os sostendrá; nunca dejará que el justo sea sacudido”
Tuve que darle esta situación al Señor, o me desmoronaría con la carga de la misma. Mi desesperación me llevó a un nuevo lugar de dependencia. Si el Señor no me sostenía, mi corazón sentía que se desmoronaría, y tenía miedo de cómo mi cuerpo estaba reaccionando al estrés.
No hubo un momento de rayo, pero poco a poco, sentí más paz. Una gran parte de esa paz llegó cuando el Señor me mostró que había hecho todo lo que me había pedido que hiciera. No íbamos a "arreglar" a nuestra hija; ese era su trabajo. Debíamos ser parte de su viaje y mostrarle el amor de Dios lo mejor que pudiéramos. Esa verdad me sostuvo en los momentos más difíciles.
Hoy, si vuestras cargas se sienten demasiado para soportar, hay esperanza. Vierta su corazón en oración a nuestro Padre Celestial, sin retener nada. Y cuando sientas que tu carga se aligera hasta lo más mínimo, dale las gracias por Su fidelidad. Ha estado ahí todo el tiempo, esperando para ayudar.
Señor, gracias por estar siempre presente en mi vida. Y gracias por los tiempos difíciles. Puede que no lo haya dicho entonces, pero ahora veo lo fiel que eras (y eres) para satisfacer mis necesidades. Ayúdame a caminar tan de cerca contigo que nunca vuelvo a mi yo independiente. te amo. En el nombre de Jesús, Amén.
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Nota del editor: Este contenido fue adaptado del artículo original "Cuando tu carga se siente demasiado para soportar" de Motivación Diaria.