Una oración por la amistad

Escrito por Kelly O'Dell

“Y este es mi mandamiento: que se amen los unos a los otros, como yo los he amado. Nadie tiene amor más grande que el dar la vida por sus amigos. Ustedes son mis amigos si hacen lo que yo les mando. Ya no los llamo siervos, porque el siervo no está al tanto de lo que hace su amo; los he llamado amigos, porque todo lo que a mi Padre le oí decir se lo he dado a conocer a ustedes.” - Juan 15: 12-15

Se nos ordena amarnos unos a otros de la misma manera que él nos amó, así que no puedo evitar pensar que hay una medida de Jesús en hacer nuevas amistades. Al abrir su vida a nuevas personas, deje que estas sencillas ideas le ayuden a transformar a un simple conocido en un verdadero amigo.

Siempre hay espacio para uno más. Ya sea que su vida esté llena de gente o que su existencia cotidiana sea bastante solitaria, hay lugar para otro amigo de verdad. La mayoría de nosotros tenemos más obligaciones que tiempo, pero la verdad es que la mayoría de nosotros no ha dominado la gestión de nuestras prioridades. No es fácil, pero si deseas dedicar tiempo a una relación, es probable que haya algo que puedas cambiar o eliminar para dejar espacio, ya sea una noche al mes durante la cual no vea Netflix de manera compulsiva para poder tener cena con un amigo. O pasar su pausa para el café poniéndose al día por teléfono. O enviarle un mensaje de texto solo porque sabes que la hará reír. O despertarse ocasionalmente una hora antes para caminar juntos antes de que el resto de su casa se despierte. Vale la pena los posibles sacrificios. (O eso me dicen. No soy una persona mañanera).

No se trata solo de ti. Comparte tus propias historias y sé real, pero recuerda que la amistad es una calle de doble sentido. Una amistad unilateral no va a ninguna parte rápidamente. Por interesantes que sean tus historias, son mejores si yo también puedo compartir las mías. Todos queremos ser vistos, escuchados y comprendidos, así que haz preguntas. Ve lo que puedes aprender. Obtener nuevas perspectivas enriquecerá tu comprensión, incluso si esta amistad no dura. En lugar de preguntarte qué obtendrás a cambio, pregúntate qué puedes ofrecer. Cambia la dinámica de la relación y a menudo resulta en bondad recíproca.

Practica el altruismo y la generosidad. Muchas amistades mueren porque una persona se resiente por hacer todo el esfuerzo, así que decide ahora ser la persona que hace la mayor parte del trabajo. La gente está ocupada y su falta de comunicación puede no ser un rechazo, sino una respuesta normal a una vida ocupada. No lo tomes como algo personal; Inténtalo de nuevo. Cuando inviertes tiempo en tus amigos, ellos sabrán que son valiosos para ti, e incluso si no responden, sabrás que lo intentaste. Cada vez que nos abrimos, corremos el riesgo de ser heridos, pero cuando nuestros esfuerzos se encuentran con el mismo tipo de espíritu generoso, la relación se expande exponencialmente y se vuelve más de lo que podría haber imaginado.

Sobre todo, antes de todo, y durante todo, ámense los unos a los otros. Parece obvio y suena trillado, pero es cierto: el amor es la respuesta a casi cualquier pregunta. En todas las cosas, erra por el lado del amor. Al hacerlo, iluminarás la vida de cualquier persona con la que estés involucrado y, a medida que practiques vivir de la manera que Jesús enseñó, verás más de él en tus amigos y ellos verán más de él en ti.

 Una oración por la amistad

Querido Señor, enséñame a amar a los demás como tú me amaste primero. A medida que establezco relaciones con los demás, déjales que te vean en la medida de mi generosidad, la autenticidad de mi bondad y la profundidad de mi amor. Todas esas cosas solo son posibles a través de ti, el Dios que permanece conmigo y me llama amigo. Amén.

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Nota del editor: contenido extraído de "Lo que necesita saber para hacer nuevos amigos" de Kelly O'Dell Stanley. Puedes leer el artículo completo aquí. Todos los derechos reservados.