Una oración por sus hijos
Por el Dr. Neil T. Anderson
“Encomienda tu camino al SEÑOR, confía también en Él, y Él lo hará”. - Salmos 37: 5
Puedes y debes defender los valores y normas cristianos en tu propio hogar. Pero cuando tu hijo se va de casa, se va con sus propios valores, creencias y agenda personal. Esta es la primera mitad de la historia del hijo pródigo (Lucas 15: 11-32). El hijo pródigo quería hacer sus propias cosas, así que su padre se lo permitió. No creo que el padre hubiera dejado que el niño gobernara en su casa, pero lo dejó ir. No nos gusta ver a nuestros hijos fallar o cometer errores como ese. Cuando lo hacen, somos demasiado rápidos para rescatarlos de las consecuencias naturales de sus acciones.
El padre de la historia le dio la bienvenida a su hijo a casa después de que el niño recobró el sentido. Su arrepentimiento fue total: “Padre, he pecado contra el cielo y ante ti; ya no soy digno de ser llamado hijo tuyo” (versículo 21). El padre nos ofrece la visión crítica que necesitamos: “Este hijo mío estaba muerto y ha vuelto a la vida” (versículo 24). Cuando su hijo está fuera de su vista, solo Dios puede traerlo a sus sentidos, traerlo a casa y darle vida.
No puede ir a todos los lugares a los que va su hijo, pero Dios sí puede. Él es el Padre celestial del niño y es plenamente capaz de protegerlo.
Sé de una querida dama que ha enterrado a dos hijos y ha sido testigo de la curación milagrosa de su esposo de un accidente automovilístico casi fatal. Pero su prueba más difícil fue descubrir que su amado tercer hijo estaba luchando contra la homosexualidad. Meses de oscura depresión desaparecieron en tan solo un día cuando se dio cuenta de que su hijo le pertenecía a Dios, así que le dio a su hijo. Durante 11 años no supo de él. Entonces, un día, la llamó y le dijo que tenía un regalo del Día de la Madre para ella. ¡Había vuelto al Señor!
Dios está en control. Cuando oras, él te libera para que hagas lo que solo Él puede hacer en la vida de tu hijo. Y cuando oras, Él puede moldear tu estilo de crianza para que puedas hacer lo que Él te ha llamado a hacer para criar a tu hijo.
Oración:
Señor, dejo a mis hijos a Tu cuidado y protección, y renuncio a mi voluntad para ellos en favor de Tu voluntad. Sé que no puedo ir a todos los lugares a los que va mi hijo, pero sé que tú lo haces. Por favor protégelos. Danos sabiduría sobre cómo ser un buen padre. Danos paz en tu bondad para con nuestros hijos y tu amor por nosotros. En el nombre de Jesús. Amén.
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Nota del editor: contenido tomado del devocional Diariamente en Cristo, Entrega tu hijo a Dios, escrito por el Dr. Neil T. Anderson. Puedes leer el artículo completo aquí. Todos los derechos reservados.