 | 11 de noviembre de 2024 Reorienta tus pensamientos |
Yo te haré saber y te enseñaré el camino en que debes andar; Te aconsejaré con Mis ojos puestos en ti. Salmo 32:8 (NBLA)
¿Con qué te obsesionas? Las obsesiones son las cosas en las que pensamos constantemente. Salen en nuestras palabras, sentimientos y decisiones. Son el centro de los libros que leemos; los podcasts, sitios web y los grupos que buscamos; y las compulsiones que seguimos. Puede ser nuestro peso, nuestras finanzas, preocupaciones sobre nuestros hijos o temores sobre nuestra salud… pero algo está absorbiendo nuestros pensamientos.
He aquí la cuestión: ¡Dios nos ha dado el poder para interrumpir esta obsesión! Eso dice la Biblia, y son noticias que desesperadamente necesitamos escuchar. Pero ¿cómo podemos interrumpir la espiral descendente?
La respuesta, al menos en parte, puede encontrarse en terapia, en comunidad o en ayuno, y ciertamente en la oración. Para ti y para mí, la respuesta se centra en Dios: Su presencia, poder y gracia. Cada espiral puede ser interrumpida. Ninguna obsesión existe fuera del alcance largo de Dios. Tal como Él lo dice en nuestro versículo clave, Salmo 32:8, “Yo te haré saber y te enseñaré el camino en que debes andar; Te aconsejaré con Mis ojos puestos en ti”.
Dios nos ha dado el poder, las herramientas y Su Espíritu para cambiar la espiral. Cuando estamos dispuestas a tomar la iniciativa para elegir pensamientos diferentes y escoger Su Verdad, varias cosas buenas empiezan a desarrollarse.
Para empezar, cuando tenemos pensamientos nuevos, alteramos físicamente nuestros cerebros. Nos crecen neuronas nuevas. Trazamos nuevos caminos. Cuando tenemos pensamientos nuevos, todo cambia para nosotras. Nuestros cerebros se convierten en aquello en lo que pensamos. Nuestras fijaciones indican neurológicamente quiénes vamos a ser.
Así que ¿quién vas a ser? Dime en qué estás pensando, en otras palabras, y te diré quién eres.
Si no nos gusta a dónde vamos, tenemos el poder de reorientar nuestros pensamientos, recordándonos a nosotras mismas lo que es real y verdadero, como una madre lo haría con su hijo o hija cuando está a punto de perder la paciencia: «Hijo, toma una pausa. Te amo. Estás bien. No tienes por qué entrar en pánico. Puedes escoger otro camino. No tienes por qué desesperarte por todo esto».
Para reorientar nuestros pensamientos, primero debemos recordarnos que el cambio es posible. ¡Tenemos una opción! Y cuanto más nos aferramos a esa verdad, más fácilmente será interrumpir nuestras obsesiones y la espiral descendente, llevándolas a algún lugar nuevo.
Puede que encuentres que algunos pensamientos, una vez interrumpidos, simplemente perderán su poder. Dios puede hacer que eso suceda. Otros pensamientos, sin embargo, pueden requerir ser tomados cautivos y reorientados diariamente, cada hora o momento a momento. Pero incluso esos pensamientos pueden ser tomados cautivos y contenidos (2 Corintios 10:5).
Puedes ser liberada. Tú puedes aprender a “cuidar tu mente”. La batalla por tu mente se gana al reorientar y reenfocarte en Jesús, cada momento, cada hora, cada día.
Jesús, ¡gracias por darme una opción! Ayúdame a cuidar bien mi mente, con el mismo tipo de amor y compasión que Tú me das. Ayúdame a elegir lo que es verdadero hoy. En el Nombre de Jesús, Amén.
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RECOMENDAMOS
Rompe el ciclo de los pensamientos tóxicos. ¿Tus pensamientos te tienen prisionera? ¿Estás cansada de sentirte constantemente ansiosa, distraída o cínica? Dios tiene la forma de liberarte de esa espiral descendente.
El devocional Controla tu mente, basado en el libro homónimo de Jennie Allen, te invita a percatarte de los pensamientos negativos que rondan tu cabeza. Estructurado para cien días de práctica, te ayudará a detener tus patrones tóxicos y te recordarán el poder de Dios para liberarte de ellos. Cada lectura incluye versículos para meditar en la palabra de Dios, una frase afirmativa para repetir diariamente y una oración personal. Deja que estas lecturas te guíen y te recuerden que Dios te ha dado el poder de ser verdaderamente libre.
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Aprende más sobre la autora más vendida del New York Times y además fundadora y visionaria de IF: Gathering, Jennie Allen, en jennieallen.com.
PROFUNDICEMOS
Romanos 12:2, Y no se adapten a este mundo, sino transfórmense mediante la renovación de su mente, para que verifiquen cuál es la voluntad de Dios: lo que es bueno y aceptable y perfecto. (NBLA)
Proverbios 23:7a, Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él. (RVR1960)
¿Cómo podrías reorientar tus pensamientos y fijar tu mente en Jesús hoy?
¿Qué versículo de la Biblia te viene a la mente cuando piensas en las promesas que Dios tiene para nosotras cuando le entregamos nuestras preocupaciones e inquietudes? ¿Cómo puedes mantener ese versículo presente en tu mente hoy? ¡Comparte con nosotras en los comentarios!
© 2024 por Jennie Allen. Todos los derechos reservados.
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